Task Force-X nº03

Título: Alguien voló sobre el nido del cuco
Autor: Juan B. Cantó
Portada: Juan B. Cantó
Publicado en: Noviembre 2014

La Task Force-X siempre se ha enfrentado a las misiones más peligrosas, aquellos que sólo los calificados como "locos" se atreverían a aceptar. Y parece que los nuevos hombres de Faraday se van a ajustar perfectamente a ese perfil...
Durante los últimos cincuenta años, una unidad militar especial ha defendido a los EE.UU. de aquellas amenazas para las que nadie estaba preparado. El gobierno nunca ha reconocido conexión con ellos pero eso no impide que  estén dispuestos a hacer cualquier cosa, cualquier sacrificio, para cumplir su misión, aunque ello implique utilizar a los más perfidos villanos en sus operaciones. Ellos son ...
Creados por Robert Kanigher, Ross Andru y John Ostrander

Resumen de lo publicado: El Presidente de los EE.UU. ha decidido reactivar la Task Force-X, el Escuadrón Suicida y Argent poniendo a la leyenda del mundo del espionaje King Faraday al cargo de todo. Éste trata de ponerse al día lo más rápido posible sobre cuales serán los hombres con los que podrá contar en esta nueva misión.

¿Tiempo? Ahora mismo. ¿Lugar? Un cazabombardero a 5000 pies de altura sobre una ubicación indeterminada de la costa este de los Estados Unidos.

-¿Que hay de Dubois… Bloodsport? ¿Qué hace encargado de la armería?

-Director Faraday, -añadió la señorita Carpenter- debe entender que el señor Dubois fue victima de un severo trauma a causa de las mutilaciones sufridas por su hermano. Su psique quedó muy dañada por la culpa autoimpuesta, lo que unido a las manipulaciones a las que lo sometió el señor Luthor…

-Luthor -la interrumpió Faraday con una mueca de desprecio.

-Si, él lo convirtió en la maquina de matar psicótica que aterrorizó Metrópolis llegando a herir de gravedad al mismísimo Superman(1). Pero, como le decía, debe usted entender que Robert ha recorrido un largo y duro camino desde aquellos días. Cuando pareció morir abatido por los disparos de los guardias de la cárcel en la que cumplía condena y fue reclutado en secreto por el gobierno, comenzó un lento proceso de recuperación tanto física como mental. Robert respondió bien a la terapia, fuimos capaces de ayudarlo a superar su trauma, o al menos eso pensábamos…

-Demonios… ¿Qué pasa con él?¿Le importaría decírmelo de una vez?

-Verá, director Faraday, Robert Dubois ya no cree en la violencia -dijo Knopf.

-¿Cómo?¿Me está diciendo que ese loco hijo de perra se ha convertido en Gandhi?

-Bueno, yo jamás lo hubiera dicho de ese modo, pero… sí. Algo así.

-Esto mejora por momentos -dijo Faraday con ironía.- Podría alguien decirme ¿para que coño lo necesitamos entonces en la TFX?

-Faraday… -dijo la señorita Carpenter- Robert es muy bueno con las máquinas y también con las armas. Digamos que el gobierno prefiere tenerlo controlado.

-Oh, que diablos… por un tarado mas a sueldo…

Knopf le miró con un gesto de indignación manifiesta, pero no dijo nada. Faraday le dedicó una sonrisa maliciosa, como tratando de pincharle. Su respuesta fue ignorarlo por completo, cosa que frustró a King.

-¿Carmichael también se nos ha vuelto una Madre Teresa?

-A la fuerza… -respondió Knopf- Clifford Carmichael, conocido como el segundo Pensador. Heredero de la tecnología de incremento mental del Pensador original. Carmichael la mejoró, convirtiendo un ostentoso casco en una serie de microchips que se “conectaban” directamente a su córtex cerebral. Esto le concedió habilidades adicionales relacionadas con las computadoras. Por desgracia los poderes dieron rienda suelta a su peor vena psicopática. Con Carmichael no funcionó el tratamiento convencional y tuvieron que emplear… otros medios… 

-Ilústrenos, Knopf -dijo Faraday con un tono entre desganado y burlón.

-Si. Básicamente lo que hicieron fue aprovechar sus chips de aumento cerebral para eliminar electrónicamente cualquier tendencia criminal que pudiera albergar en su mente.

-Un lavado de cerebro en toda regla, vamos…

-Es usted irritante Faraday, no entiendo como el gobierno le ha puesto al frente de…

-Doctor Knopf -interrumpió el agente Lockwood-. Es suficiente. El director Faraday es su superior.

- Si… como iba diciendo antes de ser interrumpido, el señor Carmichael ya no supone una amenaza para la sociedad y es un miembro altamente útil para esta organización. Debo decir que encuentro tremendamente positivo para ambos el vinculo afectivo que ha establecido con la IA de la base.

-Mindboggler…

-Así es… señor -respondió Knopf.- Como sabe, Mindboggler fue una antigua miembro del Escuadrón que cayó en combate y cuyas “pautas mentales” fueron utilizadas por la Jihad, el grupo de integristas antiamericanos meta-humanos, para crear al ente artificial que es hoy día.

-Pensaba que estaba “casada” con esa IA del Mossad…

-Se… divorciaron no hace mucho…

-Por dios… -Faraday pensaba que le estaban tomando el pelo- ¿soy el único que piensa que todo esto es surrealista? En fin… se hará lo que se pueda. ¿A quien más tenemos?

-Pues… Bolton, Lyle Bolton, alias Lock-up. Como sabe, Bolton ha estado a ambos lados de la ley. Su auténtico problema es un sentido de la justicia, digamos… algo extremo. Eso unido a que es proclive a ver el mundo en blanco y negro, le condujo en el pasado a llevar a cabo acciones de vigilantismo al margen de la ley. Sin embargo, está lejos de ser un autentico criminal en el sentido estricto de la palabra. El cree que hace lo correcto. Y desde luego tiene habilidades que pueden ser realmente útiles a esta operación, como ya ha demostrado en otras ocasiones. Sirva de ejemplo, el tiempo que pasó como “director” de la prisión de Black Gate durante el terremoto que arrasó la ciudad de Gotham. Con la debida supervisión creo que no dará problemas…

-Si, -comentó Faraday- en el dossier de CONTROL constaba como Jefe de Seguridad. Los informes son contradictorios. Pero creo que en esta faceta concreta puede funcionar. Además, las circunstancias de esta operación son, por así decirlo… poco convencionales. La norma será lo extraordinario y en consecuencia, necesitamos especialistas en lidiar con elementos con los que muy pocos o nadie mas están dispuestos o son capaces de lidiar. Bolton ha demostrado ser capaz de atrapar y contener a especimenes extra-normales. Para mi es suficiente. No obstante, quiero que esté atento, Knopf. Cualquier indicio de desequilibrio deberá comunicármelo inmediatamente. ¿Me ha entendido… doctor?

-Lógicamente, Faraday. Para eso es para lo que estamos aquí la señorita Carpenter y yo.

-El resto de los operativos de Argent me parece bastante bien.

-Es un alivio… -dijo Knopf por lo bajo.

-Vostok es muy buena. Tiene experiencia como militar en la antigua Unión Soviética, piloto de cazas, ex-Patrulla Condenada, directora de Checkmate… es excepcional dirigiendo tropas en el campo de batalla y también en los despachos. Me da igual lo que digan de ella después de todo lo relacionado con el Imperio. Es una de las mejores que he conocido. A Mitchell Black no le conozco personalmente, pero su expediente no me es desconocido. Fue miembro del proyecto Pacificador(2) ¿Qué tal se está adaptando a su nuevo puesto como jefe medico de la operación?

-Pues, debo decirle, Faraday, que está mas que contento. Tenga usted en cuenta que era médico antes de que le “alistaran” en el proyecto Pacificador. El hecho de tener la oportunidad de volver a practicar la medicina de manera oficial, ha sido para él como ver la luz al final de un túnel muy largo.

-Todo no iban a ser penas, ¿verdad, doc? Lo que yo quiero saber es si, en caso de necesitarlo, podría actuar en una situación de combate. ¿Es operativo como médico de campaña?

-No es su función primaria, pero si. Mitch es totalmente operativo. Es un buen médico y mejor persona. Y está perfectamente cualificado para lidiar en situaciones de estrés. Era el Pacificador, no lo olvide.

-Era, un Pacificador. Gracias a dios no es el original… ya tenemos bastantes desequilibrados en plantilla.

-¿Quiere que pasemos ya a los miembros del Escuadrón?- Preguntó Knopf.

-Si, pero empiece por lo miembros voluntarios.

-Si, los voluntarios… Benjamin Turner, también conocido como Tigre de Bronce. Uno de los mejores artistas marciales del planeta. Según dicen, es capaz de intercambiar golpes de tu a tu con el mismísimo Batman.

-Cuénteme algo que yo no sepa, Knopf.

-Ya me estoy cansando de sus modales, Faraday… en fin… Turner ha superado por completo las dudas sobre sí mismo que le generaban el lavado de cerebro al que fuera sometido por la Liga de Asesinos. Su mente le pertenece por completo y eso le da una confianza de la que antes carecía, convirtiéndolo en una persona tremendamente equilibrada. Como ya sabe fue miembro del antiguo escuadrón de Waller y Flagg y sucedió a este último como líder de campo.

-Conozco a Ben desde hace tiempo. Es un privilegio tenerlo en el equipo. Siga…

-Mari Jiwe McCabe, alias Vixen, es la otra voluntaria. Nacida en el África subsahariana y criada en parte en los Estados Unidos. Posee la capacidad de duplicar las habilidades de las bestias de la jungla. Ha sido miembro de la Liga de la Justicia y colaborado con diversas agencias de seguridad nacionales e internacionales. Es una mujer independiente, inteligente y muy capaz. Trabaja muy bien en equipo, no presenta un perfil psicológico problemático. Por poner un pero, yo diría que volver a juntar a ambos en el mismo equipo puede ser o bien beneficioso o bien contraproducente, debido a la relación personal que Turner y McCabe mantuvieron en el antiguo escuadrón. Pero como ya he dicho, ambos son suficientemente maduros emocionalmente como para que esta situación no suponga un serio problema.

-Entonces nada de “Atracción Fatal”, ¿verdad doc? -Knopf ni se molestó en contestarle esta vez-. Prosiga, Knopf.

-Hope Taya…

¿Y esta quien es? Me suena, pero…

-Era parte del equipo de seguridad de Luthor. Estaban ella y una tal... Mercy Graves. Una morena y una rubia. Hay que reconocerle a Luthor que sabía rodearse de lo mejor.

-¡Demonios, es verdad! ¡Una tía cachas! ¿Qué tienes para mi?

-Nada. No hay datos. Ni el FBI, ni la INTERPOL. Ni siquiera la CIA tiene constancia de que haya existido antes de ser guardaespaldas de Luthor. –Dijo el agente Lockwood- Al parecer solamente respondían ante Luthor y sólo el estaba al corriente de su verdadera identidad.

-Interesante-comentó Faraday.- Es perfecta para nosotros. ¿Habilidades meta-humanas?

-Varias –respondió el agente-. Fuerza, resistencia, velocidad y reflejos sobrehumanos. No está al nivel del Gran Boy Scout azul, pero puede ser un activo muy valioso, señor.

-¿Problemas, doc? –inquirió Faraday, intrigado.

-No está lista para entrar en acción. Apenas si se ha recuperado físicamente. Verá, la encontraron en LexCorp. Al parecer la tenían allí, digamos que retenida ilegalmente(3). Sufría traumatismos severos por todo el cuerpo. El punto al que quiero llegar…

-¡Aleluya! –dijo Faraday para hacerle la puñeta al doctor Knopf.

-El punto, como iba diciendo –dijo Knopf mirando a Faraday con auténtico asco- es que no parece recordar quien es. O al menos eso dice. Hemos estado trabajando con ella y creemos que podría estar diciendo la verdad, pero pensamos que aún es pronto para incluirla en el operativo. Preferiríamos que nos diera un tiempo prudencial para continuar con la evaluación. Quizás para hacerla recordar o descubrir algo mas.

-¿Cuánto tiempo?

-Es difícil decirlo…

-¡Oh, está bien, que demonios! Húrguele en la cabeza doc… a ver lo que puede sacar de ella. ¿Qué más tienen para mí?

-¿Rene? –Knopf le pasó la patata caliente a su asistente, a la que pilló por sorpresa.

-Si… -la señorita Carpenter ordenó sus notas apresuradamente- veamos… Tenemos a Hardsell, Firebug, Disruptor, Bolt y Deadshot. Pero Lawton está todavía en la enfermería con la mayor parte de los huesos del cuerpo fracturados después de la paliza que le propino Nightwing(4).

Faraday sonrió otra vez, con esa sonrisa resabiada y algo maliciosa suya, mientras cogía una cajetilla de American Spirit del bolsillo interior de su chaqueta.. Del bolsillo del pantalón sacó un zippo plateado, con el emblema de la Oficina de Servicios Estratégicos grabado en el.

-Ni se le ocurra, -le espetó la doctora McGee - DENTRO DE ESTE AVION, NO.

Faraday miró al agente, que se encogió de hombros.

-Está bien, está bien… pensaba que Control la había asignado a esta operación como oficial científico, no para hacerme de niñera… -Faraday volvió a sonreír.

-La caja, ¿se acuerda? Además, no me gusta el humo. Y menos en un espacio cerrado.

-Usted manda, Tina… -Faraday guardo el zippo y volvió a meter el cigarrillo en la cajetilla- Por favor, doctora Carpenter, ¿podría proseguir con el informe de reclutas?

-Aaahm… si, por supuesto. LeRoy Thompson, alias Hardsell. Tiene experiencia militar, aunque fue expulsado por mala conducta. Ha desarrollado una discreta carrera como mercenario, principalmente en el grupo de tecno-piratas conocido como Black OPS, bajo las órdenes de un individuo que se hacía llamar Hazard. Se enfrentaron en varias ocasiones con Steel, el héroe blindado de Metrópolis. En uno de sus últimos enfrentamientos fue detenido y puesto bajo custodia del Gobierno. Es inmaduro y no acata órdenes fácilmente, lo cual puede ser bastante problemático, debido a su fuerza sobrehumana y su piel prácticamente impenetrable.

-Hay que meterlo en vereda. No se preocupe, señor. Es cosa mía. – añadió El Agente Libertad.

-Ya lo han oído, doctores. Es cosa suya. Puede proseguir, Rene.

-Joseph Rigger, apodado Firebug. También tiene experiencia militar. Tiene graduación de sargento. Llegó incluso a distinguirse con varias condecoraciones. Experto en demoliciones. Su familia murió en un accidente debido a la construcción defectuosa del edificio en que vivían. Aquello trastornó a Rigger, que comenzó un raid en Gotham quemando edificios, ataviado con un traje especial que le confería poderes flamígeros. Batman lo detuvo, aunque consiguió escapar. Trabajó como mercenario y trató de reformarse en un par de ocasiones sin éxito. Fue reclutado en una de sus últimas estancias en prisión. Es… es un hombre bastante triste en realidad. La perdida de su familia lo destrozó. No tiene ningún tipo de arraigo. Hasta el ejército le repudió y su carrera como mercenario ha sido bastante… bueno, lo cierto es que ha sido un desastre -Faraday la escuchaba con una mueca en la cara. Menudo material le había empaquetado Control-. Considero que con Rigger deberíamos emplear una táctica diferente. Este hombre necesita un asidero, un núcleo estable sobre el que reconstruir su vida y del que ha carecido por un motivo u otro desde que su familia murió. Si conseguimos que se sienta cómodo e integrado creo que puede ser una pieza importante de este operativo. Y creo que también será algo bueno para él.

-Claaaaaaaaro, doctora, primero le daremos unas palmaditas en la espalda y después nos iremos todos juntitos a darles unas galletitas a los niños pobres del hospital de San Eligius cantando el Cumbayá. Eh, McGee ¿me deja usted que me fume uno ahora, antes de que caiga en un coma diabético? -el ceño fruncido de Tina McGee fue suficiente respuesta- No, creo que me lo fumaré cuando bajemos del avión… si es que no salto antes… ay… bueno, siga, señorita Carpenter.

-Disruptor. Veamos… sí, su nombre real es Beldon, Michael Beldon. Hijo de Theodor “Brains” Beldon, un conocido genio criminal que se enfrentó en el pasado a Batman. Al parecer, Brains tenía la aspiración de entrar a formar parte de la organización criminal conocida como H.I.V.E. . Para conseguir su asiento en la cúpula de H.I.V.E., Brains tenía que acabar con los Nuevos Titanes. A fin de lograrlo, fabricó un traje especial con la capacidad de… textualmente, “alterar el orden natural de las cosas”. Michael, buscando la aprobación nunca conseguida de su padre, se puso el traje y trató de cumplir la misión, fallando estrepitosamente y siendo capturado y puesto a disposición de la justicia por los Titanes. A pesar de que lo encubrió para que no fuera a la cárcel, asumiendo por completo culpa y condena, su padre lo repudió definitivamente. No se han vuelto a ver desde entonces…

-Me parte el corazón, señorita Carpenter –se burló Faraday.

-No sea cruel, King. Déjeme continuar, por favor.

-Discúlpeme Rene. He sido muy desconsiderado. Adelante, siga con el culebrón –Carpenter resopló y se echó el pelo hacia atrás antes de seguir. Knopf miraba a Faraday con el ceño fruncido.

-En fin… después de eso ha entrado y salido de la cárcel en varias ocasiones. Básicamente se ha dedicado a hacer de matón y a cometer pequeños golpes. Me da lástima…

Knopf la interrumpió:

-Rene, recuerde que no debe involucrarse personalmente con el paciente. Siga, por favor.

-Si, doctor. Tiene razón. Pero es que es tan triste lo que ha pasado con este muchacho.

-Imagínese… -la cortó de nuevo Faraday.

-Es un niñato, señor –el agente Lockwood entró en la conversación-. Si no fuera porque el traje está codificado para su firma genética, ya se lo hubiéramos dado a alguien que mereciera la pena. En mi opinión es un juguete roto. Si de mi dependiera…

-No depende de usted, Lockwood –dijo King Faraday-. Bueno, dejémonos ya de zarandajas. Knopf, su opinión, mal que me pese, es la que cuenta. ¿Qué dice usted, comecocos?

-En mi opinión creo que, a pesar de sus problemas personales, es perfectamente capaz de participar en las misiones. No obstante, creo también que podemos ayudarlo a superar su conflicto edípico y a mejorar su confianza y  autoestima.

-Entonces le damos el “apto” y le apuntamos para otro Cumbayá, ¿no es eso, doc? -Knopf asintió con resignación-. Continuemos antes de que se me acabe la paciencia y cumpla mi amenaza de tirarme del avión en marcha.

-Por mí no se corte, Faraday…

-JA-JA-JA. Muy agudo, doc. No tendrá tanta suerte –las puyas entre Faraday y Knopf, a estas alturas ya habían alcanzado unas cotas cómicamente absurdas-.  ¿Siguiente?

-Bolt

-Vaaaaaaaya. Este es un clásico. Déjeme, déjeme, Knopf. Bolatinsky, Larry. Lleva un traje que le da poderes: Vuela, se teleporta y lanza descargas eléctricas. Mercenario, asesino, ladrón. Un poquito de todo. Es como un hombre orquesta del crimen. ¿Qué recomienda para este, Knopf? ¿Cursos de calceta? ¿Papiroflexia?

-Dinero.

-¿Qué?

-Ya me ha oído, Faraday. Todos los operativos perciben unos emolumentos por participar en esta operación. Simplemente, “enséñele la zanahoria” y deje que la siga.

-¿Y ya está? Todo un afamado doctor en psicología, abalado por el mismísimo, por el insigne doctor Simon Lagrieve… ¿¡Y nos recomienda el truco de la zanahoria y el asno!? ¿¡Que le engatusemos con el dinero!? Me desconcierta, comecocos… me desconcierta.

-Mire, King. No soy tan ingenuo ni tan meapilas como usted piensa. Mi juramento como médico y la ética profesional, dictan que nunca debo dar a un paciente por perdido. Sin embargo, la experiencia personal me ha demostrado que también existen casos excepcionales en los que las terapias convencionales poco pueden hacer. Así que, en mi opinión, lo mejor que puede hacer es tenerlo contento y vigilarlo o meterlo en una celda y vigilarlo. En cualquier caso, no lo pierda de vista.

-Gracias por el consejo, doc. Aunque para eso, tampoco me hacía falta un comecocos.

¿No se le ha olvidado nadie, loquero?

-Guardaba lo mejor para el final –respondió Knopf-. Floyd Lawton, alias Deadshot. ¿De verdad necesita que le hable de él, Faraday?

-No, creo que no es necesario. Todo el mundo conoce a Lawton. Uno de los mejores asesinos a sueldo del mundo. Un tirador infalible. Un suicida vocacional. Sin miedo a morir, sin moral, sin ataduras…

-Eso no es del todo correcto, señor -le interrumpió Carpenter-. Hemos descubierto que tiene un hija, una niña pequeña. No está casado con la madre, pero les envía dinero regularmente. Esto demuestra claramente cierta implicación emocional.

-Implicación emocional dice, ¿eh? Mmm… interesante.

A Faraday le brillaron los ojos mientras le daba vueltas a una idea. Y cuando a King Faraday se le ocurría una idea, hasta en Apokolips se echaban a temblar…

Continuará...

Referencias:
1.- Ver Superman vol 2 #04
2.- El proyecto Peacemaker fue el intento de crear una fuerza policial especial contra el terrorismo, compuesta por una serie de agentes muy especiales. Aunque fracaso en un principio y tuvo que ser retomado inicialmente por iniciativa privada (la Fundación Pax). El Proyecto Peacemaker ha colaborado con diferentes gobiernos y agencias en numerosas ocasiones.
3.- Hope Taya traicionó a Luthor  fue torturada y lobotomizada por ello. Ver Superman v2 #194

4.- Ver Nightwing #04

2 comentarios:

  1. "la espera ha valido la pena y el siguiente capitulo de TFX escrito por Juan Canto comienza a poner el listo muy alto. las charlas entre los personajes han resultado amena, la aparición de personajes tan viejos y con un trasfondo interesante llama la atención; al menos a mi, ya quiero ver como interactuaran entre si. Por otro lado, me gusta como todo se esta integrando al trasfondo político de Tierra-53; nuestro amigo ha hecho un excelente trabajo que sin duda enriquece nuestra tierra.

    ¿La portada? un arte genial que coincide con el titulo"

    Comentario publicado anteriormente por el usuario "William Darkgates" con fecha 08/11/2014

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  2. "Me parece un numero interesante, presentando los personajes. Pero tengo la impresión de que falta un poco de acción. Parece un grupo muy polivante. Tigre de Bronce, Negative Woman, Disruptor, Bolt, Hardsell. Me pregunto cual palmará (si se sigue la tradición del Escuadrón Suicida, claro)"

    Comentario publicado originalmente por el usuario "Roger Nowhere" con fecha 03/12/2014

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