Los Invasores nº04

Título: Reunión
Autor: Miguel Ángel Naharro
Portada: Florentino López
Publicado en: Agosto 2003

Los invasores vuelven a estar en activo y con una nueva persona que será su contacto con el gobierno y las naciones unidas: Valerie Cooper.
El primer grupo que lucho por la libertad durante la segunda guerra mundial. Un grupo que inspiro a generaciones de héroes. Ahora los héroes han decidido volver a primera línea.
Stan Lee y Action Tales presentan a

Creado por Roy Thomas, Sal Buscema y Frank Robbins

Eddie tenia frío y intentaba taparse con unos viejos y rotos cartones. Alan no estaba, se había marchado a buscar alguna limosna o quizás su suerte cambió y encontró el refugio abierto para pasar la noche. Seguramente lo vería por la mañana, mientras tanto disfrutaría de una botella de whisky que había podido conseguir, además de un par de cigarrillos. Este seria una gran noche para Eddie.

Se escucharon unos pasos, el vagabundo escondió su botella como si fuese un preciado tesoro. Eddie miro con desconfianza hacía la figura que se acercaba por el estrecho callejón.

- ¿Tiene fuego, señor?.

El Hombre sonrió.

- Por supuesto...

Momentos después la figura abandonaba el callejón. Cuando Alan regrese y busque a Eddie solo encontrara un humeante montón de cenizas....


Era una noche lluviosa, los relámpagos se sucedían perforando las nubes, oculto en las sombras una figura de color esmeralda observaba como la gente caminaba de aquí para allá, pudo ver a un hombre, con cabello largo, sucio y mugriento, sin afeitar, con ojos inyectados en sangre, con aspecto descuidado, con una cazadora manchada y medio abrochada sobre una camiseta negra y rota, le temblaban las manos y no paraba de sudar, un drogadicto, sin duda, vigilaba el interior de una pequeña tienda, esperando a que los clientes la abandonaran seguramente para atracarla. Un relámpago brilló y un trueno retumbo, el drogadicto miro hacia el cielo asustado.

La tienda no tardo demasiado en quedar desierta, sin saber muy bien por que, Aarkus también conocido como la Visión lo siguió. Oculto a las miradas indiscretas, virtualmente invisible para los ojos de los hombres. El individuó se introdujo en la tienda de comestibles. En la tienda solo quedaba el dueño, un hombre de mediana edad, bajito y de cabello encanecido, con una chica a su lado, tendría apenas unos dieciséis o diecisiete años , era una chica con unos preciosos ojos azules, y un cabello negro recogido en una cola de caballo.

Pudo ver como el hombre estuvo a punto de saludar al recién entrado ”cliente”, pero guardo silencio al ver su aspecto. El drogadicto sacó una pistola de debajo de la cazadora.

- Dame todo el dinero, tío.

- Vale, pero no nos hagas nada.- dijo el hombre

- Date prisa ¡venga!.- En la voz se notaba el nerviosismo del atracador

Aarkus observaba sin que nadie pudiese verle. Uno de los talentos innatos de un Ykraiano es el de ser virtualmente invisible si se quiere. ¿ Por que estaba allí? ¿ por que no me estaba con sus compañeros Invasores? No parecía tener nada que hacer ahí, sin embargo algo que no podía explicar le mantenía en el lugar.

- Tómalo, esto es todo lo que ahí, no a sido un buen día.

El atracador se lamió los labios, miraba a un lado y a otro nervioso, no le paraban de temblar las manos.

- ¿Esto es todo? ¡dame el resto!.-gritó

La chica se movió.

- ¡ No te muevas!.-gritó el atracador

-Por favor, no le hagas daño.

-Es una zorra, todas son unas malditas zorras, grandes o pequeñas, a lo mejor tienes algo que me puede interesar..

El miedo se podía ver reflejado en el rostro del hombre.

- Vete. Por favor, ya tienes el dinero, vete.

El atracador negó con la cabeza.

- No te preocupes, no voy a matar a nadie, pasare un buen rato con tu pequeña zorrita y después me marcharé.

Eso era algo que Aarkus no podía permitir, antes de que pudiese actuar, el padre de la chica hizo amago de golpear al atracador, este no se lo pensó dos veces y le disparó a quemarropa. El dueño de la tienda cayo fulminado envuelto en un charco de sangre. La chica comenzó a llorar y a gritar, el atracador la silencio golpeándola con la empuñadura del arma, este, sin dejar de sonreír se abalanzo sobre la chica.

La ira invadió a Aarkus, por culpa de su indecisión y su falta de reflejos, un hombre había muerto, y una pobre chica iba a ser violada, no lo permitiría, era su responsabilidad.

Apareció de las sombras delante del atracador, este, al ver el grotesco y inhumano aspecto del Ykraiano, comenzó a chillar como un cerdo asustado, tenia motivos para estarlo. Empezó a disparar, al ver que los disparos no me le hacían ningún daño comenzó a desesperarse. La expresión de su

rostro cambio y se llevo las manos al pecho, en un momento se desplomo. El miedo le había provocado un paro cardiaco.

Aarkus se acercó al atracador y comprobó que estaba muerto. Después se acercó a la chica. Se inclino levemente sobre ella y observó su rostro. Era hermosa, muy hermosa.

Sintió algo en su interior que le hizo recordar sentimientos que creía olvidados. Su honor le exigía proteger a esta chica durante el resto de su vida. Ella nunca estaría sola. El la protegería de cualquier mal, cualquier peligro. Desde esta noche Aarkus seria su ángel guardián. Así lo exigía el juramento Ykraiano de la vida.

Se envolvió en su capa y desapareció en una nube de humo, mientras las sirenas de la policía se escuchaban en las cercanías.


La actividad en la Hidrobase era frenética en los últimos días. El doctor Walter Newell sentía como la tranquilidad se había terminado para el y su esposa Diane.

Suele ocurrir cuando el lugar donde vives y trabajas se convierte en el cuartel general de un grupo de superhéroes.

- ¡Doctor Newell!.

- Llámeme Walter, srta. Cooper.


Valerie Cooper sonrío. Una sonrisa un poco forzada. Llevaba un dia muy ajetreado y tenia un creciente dolor de cabeza.

- Te llamare Walter si tu me llamas Valerie ¿han llegado ya los técnicos de Stark solutions?.

- Si, Phestos esta con ellos.

- Perfecto, así podré hablar tranquilamente con el Capitán. Si pasa alguna cosa estaré en la zona de las habitaciones.

Tras decir esto, Valerie Cooper se marcho hacia el edificio principal.

Mientras tanto, los técnicos desempaquetaba el equipo necesario para reformar las instalaciones de la isla artificial.

Phestos observaba con curiosidad el trabajo que realizaban los técnicos.

- Vaya, que chicos más guapos. Comentó una dulce voz femenina.

Los técnicos comenzaron a silbar y a decir piropos a una hermosa chica .

- Lykena, no molestes a esta gente. Dijo risueño el eterno.

- Desde luego, cariño, sabes como estropearle la diversión a una chica. Y de repente, desapareció en una chasquido de luz, ante los asombrados técnicos.

- No se preocupen, no era real.

- ¿No? Vaya, como se divierten aquí... Comentó un técnico.

- mmm voy a tener q volver a el avión, este soldador esta estropeado... Dijo otro técnico

Phestos se acerco hacía donde estaba el técnico y mirando la maquinaria con la que estaba trabajando dijo:- No hace falta, espera un segundo, mortal.

Ante la atónita mirada del hombre, de los ojos del eterno surgieron dos rayos térmicos con los q soldó sin problemas la pieza con la que estaba ocupado el técnico.

Mientras Valerie Cooper caminaba por los pasillos del complejo principal pensaba en todo lo ocurrido en las ultimas semanas. Cuando asistió a la rueda de prensa en el edificio Tempo1 y descubrió que los Invasores se habían reunido de nuevo, tuvo una revelación. En breve tiempo el mundo había sido soportado una Guerra con Kang, un intento de dominio mundial por parte de los Defensores y un ataque del villano llamado Gravitón, entre otras amenazas2. El departamento de comisiones Superhumanas aprobó recientemente, y por sugerencia de la misma Valerie, un plan para organizar un nuevo equipo de superseres, que financiado por el gobierno, y al igual que los Vengadores, debería hacer frente a amenazas para el mundo entero. El retorno de los Invasores le vino como anillo al dedo, aunque en un principio el Capitán América y sus compañeros fueron un hueso duro de roer, finalmente, y con el compromiso de que tendría plena autonomía y libertad aceptaron. No serian un super escuadrón del ejercito Usa, serian una fuerza de paz, no solo de los estados unidos, si no de la ONU. Valerie seria su enlace con el gobierno de los Usa y con la ONU., y ella sentía algo que no sentía desde que fue enlace gubernamental de Factor-X. Y eso le gustaba, añoraba esos tiempos.

Se paro ante la puerta de la habitación de Druida. La puerta estaba entreabierta.

-¿Doctor?

No contesto nadie, así que llevada por la curiosidad abrió la puerta y entro en la habitación. No podía creer lo que sus ojos estaban contemplando.

El interior de la habitación era un inmenso bosque, árboles, un riachuelo, pájaros.

Sus sentidos no la engañaban, era totalmente real.

Observo con sorpresa que la puerta había desaparecido sin dejar rastro.

Se adentro en el denso bosque, los árboles eran tan altos que sus ramas apenas dejaban pasar algo de luz.

Valerie intentaba tranquilizarse, pero no podía quitarse de la cabeza que estaba siendo observada, como si miles de ojos no dejaran de clavar su vista en ella. Le daba la sensación de que los árboles se inclinaban sobre ella, oprimiéndola con su sola presencia. Escucho algo, como si algo se arrastrase hacía ella. Reunió el valor suficiente para gritar:- ¡¡¡Doctor!!!

Justamente, en ese momento, una figura surgió de entre los árboles. Esta semidesnudo, solo cubierto por un sencillo taparrabos, su cuerpo esta cubierto por símbolos y runas arcanas, dibujada con pintura roja, muy similar a la sangre. Anthony Ludgate se acerco a la asustada Valerie Cooper .

- No se asuste, Srta. Cooper, aquí no corre ningún peligro.

- ¿Dónde estamos? ¿qué sitio es este?.

- Estamos en el bosque de Gloucester, en Inglaterra, la puerta de mi habitación esta conectada místicamente a este lugar, un lugar de poder donde mi energía psíquica y mística es más poderosa. Le rogaría que no entre a no ser que sea acompañado por mi, esto no es peligroso, pero igual puede hacerse daño usted sola...

- No se preocupe, Doctor, no creo que me vea mucho más por aquí. Solo quería confirmar que estará en la cena de esta noche.

- Por supuesto, querida, no me lo perdería por nada del mundo.- Dice Druida con una sonrisa.

- Si es tan amable de enseñarme la salida.

Delante de ella apareció la puerta de la habitación.

- Nos veremos en la cena, Srta. Cooper.

Ella asintió y atravesó la puerta sin mirar hacía atrás. Valerie se consideraba una mujer muy segura de si misma y no acostumbraba a perder el control, ahí dentro había estado muy cerca...

Una estela amarilla y roja paso como un rayo alrededor suyo. Era Spitfire.

- Valerie, encantada de verte de nuevo.

- Igualmente, Jacqueline, me encanta tu nuevo uniforme.


El uniforme que lucia Spitfire era distinto, era de color oro y rojo, llevaba cubierta la cabeza, dejando la boca y la nariz libres, con un visor transparente, y su pelo rubio recogido en una coleta. En sus manos unas nudilleras especiales para cuando golpeara a mucha velocidad no se hiciera daño.

- Si ¿verdad? .Ya era hora de cambiar un poco de imagen, algo más moderno, mi antiguo uniforme era fantástico en los 40, pero un cambio de look me ira muy bien.¿Dónde ibas, Valerie?.

- A ver al Capitán, pero he visto entreabierta la puerta de la habitación de Druida y... La verdad, ese hombre me da escalofríos, Jacqueline.

- No te preocupes, el Capi confía en el, y si el lo hace yo también.

- Si, claro... ¿dónde están los demás?.

- Jim esta en Nueva Jersey, pero estará para la cena, Aarkus quien sabe donde esta, aparece y desaparece sin avisar a menudo y Joey esta con un amigo que ha venido a visitarlo.

- ¡Profesor Hunter! ¡ Cuanto tiempo!

Joey abrazo a su antiguo compañero y amigo. Un anciano, con gafas, con pelo totalmente blanco, ojos que transmitían mucha vitalidad le devolvió el abrazo.

- Joey, me entere que volvías por la parte grande a el negocio de los superhéroes y me decidí a hacerte una pequeña visita.

Joey sonrió alegremente.

- ¿No habrás venido a unirte a nosotros? sabes que seria un placer, Profe.

- No, para nada, Albión3 esta retirado del servicio activo, no ha llegado aún el momento de regresar, Joey. ¿Cómo estas?.

- Bien, no me he aburrido mucho estos ultimas semanas precisamente.

- ¿Y como que te has unido a esta nueva formación de los Invasores? Tu nunca has siso muy amigo de estar en grupos, ni siquiera cuando estábamos ambos al servicio del Caballero Verde 4, a mi no me engañas, Joey, ahí algo más.

- Profe, nunca le he podido engañar ... Ese algo más es Jacqueline...


Hunter se quitó las gafas y comenzó a limpiar los cristales con una gamuza mientras no paraba de sonreír.

-Ah, Mujeres, ya imaginaba que iba por ahí el asunto... ¿Sabe ella que te gusta?.

-¡No! no me atrevo, ella es la madre de mi mejor amigo, siento algo por ella, pero también una parte de mi rechaza esa idea, cree que no esta bien.

- ¿Cuál es el problema, Joey? Tarde o temprano tendrás que decirle tus sentimientos, en mi opinión tendrías que abrir tu corazón, Jacqueline es una jovencita encantadora, seguro que ella sabrá apreciarlo.

- ¿Jovencita? Podría ser mi madre, y ese es uno de los problemas, tiene el aspecto de una jovencita, pero no lo es. Estoy en un mar de dudas, y mientras resuelvo esas dudas me conformo con estar cerca de ella.

- Para mi sigue siendo una jovencita, recuerda que yo soy de la quinta de Lord Falsworth, su padre5. Te deseo lo mejor, Joey, lo sabes, espero que tu decisión sea la acertada, si necesitas cualquier cosa, ya sabes donde encontrar a este viejo profesor.

- Venga, Profe, dejemos de hablar de mi, y hablemos de otros temas.

Dejamos a los dos amigos que se han reencontrado para dar paso a una sala llena de monitores. Donde un viejo soldado vestido con un traje azul de barras y estrellas habla con alguien al otro lado de un monitor.

- ¿Así que has reunido a tu antiguo grupo, Capi?.

- El destino es el que nos ha unido, Janet, por eso he pedido el permiso indefinido como miembro de los Vengadores. Siento que mi lugar, al menos de momento, esta con los Invasores, pero sabes que podéis contar conmigo para cualquier cosa.

Janet Van Dyne más conocida como la Avispa rió divertidamente.

- ¿Qué te hace tanta gracia, Janet?


- Oh, nada, Capi, que estaba pensando que ya tenemos rival para el partido anual de béisbol, desde que los Nuevos Vengadores dejaron de existir no hemos tenido uno, y será divertido.- Comento guiñándole un ojo al abanderado vengador.

- Claro, Janet, el placer va a ser nuestro, pero recuerda, el equipo perdedor paga la comida, recuérdalo cuando os ganemos.

- ¡Ja! No tenéis ninguna posibilidad. Ahora en serio, Capi, espero que os vaya muy bien, seguimos en contacto. Janet fuera.

La imagen del monitor desapareció. Steve Rogers pensaba que también debía cambiar algunas cosas en su vida, hacía mucho tiempo que el Capitán América no tenia vida propia y eso tenia que terminar.

- Un penique por tus pensamientos, Capitán.

Eran Valerie Cooper y Spitfire.

- No valen tanto, Valerie.

- Seguro que valen su peso en oro.- Dijo divertida Valerie

- ¿Solucionadas las cosas con tus amigos Vengadores?

- Si, sin ningún problema ¿cómo van los accesorios y las reformas de las instalaciones de la Hidrobase?.

- Vamos cumpliendo los plazos. Tengo mucha confianza en que pronto esto este en marcha, este grupo será un éxito, Capitán, ya lo veras.

- No lo dudo, Valerie, ¿me acompañáis las dos a ver como va el trabajo de los técnicos?

Los tres se marcharon. Dejando a solas la sala. Aunque no era enteramente cierto. Oculto en las sombras, invisible a ojos curiosos, se encontraba un cuervo negro como la noche.


En otro lugar, el hombre llamado Ahmet fue situado en frente de Mehemet, el superser conocido en Egipto como el Escarabajo Escarlata.

- Tenemos mucho más en común de lo que crees, Mehemet.

El escarabajo Escarlata intentaba concentrar toda su voluntad en su amuleto místico de poder, pero no servia de nada, no conseguía liberarse del poder que lo apresaba.

- Es inútil, no gastes tus fuerzas inútilmente.

- ¿Qué es lo que quieres de mí?.- Grito el Escarabajo.

- Tu estas ya bajo mi control, si no obedeces mi voluntad, el escarabajo de fuego que he implantado en tu pecho te devorara el corazón. Lo que quiero es que me guíes hasta el cofre de los antiguos elementos....

- ¡Estas loco! Eso solo es un mito, una leyenda.

- ¿Cómo lo era tu amuleto místico? Dijo Ahmet con una sonrisa sarcástica.

- Serás mi perro de presa, tu rastrearas los objetos que me llevaran ante el cofre de los antiguos elementos y cuando lo obtenga...¡ El poder será mío de nuevo!


La noche había caído ya en la Hidrobase. El calor de una hoguera se reflejaba en los rostros de los invitados a la cena. Una cena en la playa donde se encontraban Valerie Cooper y los Invasores.

- Wendell, cuando me comentaste lo de la cena, no pensabas que te referías a esto.- Comento Valerie.

- La idea te ha gustado ¿a que si?.

-¡ Y tanto! ¡hacia siglos que no cenaba en la playa!.

Diane repartía el marisco y el resto de la cena, Druida conversaba amablemente con ella , Phestos y el Capitán se contaban antiguas historias de guerra, ganando el eterno en antigüedad y en detalle en las suyas. Aarkus se mantenía un poco al margen, con aire pensativo, quizás recordando unos bonitos ojos azules.

- ¿Dónde estará Jim? Me prometió que no faltaría. Dijo Jacqueline

- Quien sabe... Contesto algo molesto Joey.

Del cielo descendió envuelto en llamas la Antorcha.

-¡ Espero que quede marisco!

- ¡Jim! Dijo visiblemente contenta Jacqueline, ante el evidente enfado de Joey.

- ¿Dónde has estado, Jim?.- Pregunto el Capi.

- Oh, nada especial, unos asuntillos en la ciudad, nada importante.

- Ahora que estamos todos me gustaría proponer un brindis. Por el futuro que nos espera, que sea tan glorioso como lo fue el pasado.- Dijo Valerie.

Todos elevaron sus copas y brindaron.

Continuará...

Próximo número: Tras estos breves momentos de paz, llegaran problemas, y de los gordos, no os perdáis la visita de un viejo personaje, una chica encantadora pero con muy malas pulgas...

Si te ha gustado la historia, ¡coméntala y compártela! ;)


Referencias:
1 .- Como se pudo ver en los Defensores#3, aquí mismo en Action Tales
2 .- Como se ha podido ver en Los Vengadores nº 4 1-55 del Vol. 4 de Planeta, en The Order 1-4 Y Thunderbolts Vol. 2 #4-5
3 .- Albión antiguo superhéroe ingles que participo en la primera guerra mundial y que perteneció a los Caballeros de Pendragón y a la Guardia Oscura(Dark Guard). Ambos grupos de la extinta Marvel UK.
4 .- En el vol. II de los Caballeros de Pendragón
5 .- Lord Montgomery Falsworth, el primer Union Jack.

No hay comentarios:

Publicar un comentario