Los Defensores nº05

Título: Ansias de conquista
Autor: John Schneider
Portada: Sergio Calvet
Publicado en: Noviembre 2003

Los Defensores tienen el gusto de invitarte al evento mas importante de la temporada en Nueva York, cuando abran las puertas de su nuevo y flamante cuartel general. Un cambio que redefinirá completamente la trayectoria del equipo.
El Doctor Extraño. Hulk. Estela Plateada. Namor. Poderosos guerreros que no encajan en ningun grupo. Cuatro héroes que se reúnen sólo cuando la Tierra se enfrenta a las mayores amenazas. Ellos son el "no-grupo" más famoso de la historia. Ellos son...
Creado por Roy Thomas y Ross Andru

Resumen de lo publicado:Los Defensores y SHIELD llegan a la Tierra Salvaje donde encuentran una instalación secreta de Cráneo Rojo y el helitransporte robado que derriba al de SHIELD. Se desvela el origen del Hechicero, que tras enviar sus tropas a combatir a los recién llegados se aísla para liberar a Sherkelen. Mientras en el edificio Tempo llega un nuevo miembro, la Hermana Nada, y Warren organiza una fiesta en la sede de la Corporación X


Frente a frente, Cráneo Rojo y Namor. Su lucha empezó en la Segunda Guerra Mundial, sin embargo sus motivos siguen tan vigentes como entonces. Cráneo Rojo lleva una armadura nueva, con la misma tecnología que con la que ha reforzado el Helitransporte. La armadura es dorada y recuerda mucho a una que llevó recientemente cuando se apoderó del cubo cósmico (1), pero es diferente, la recorren tubos de luz que acaban en círculos rojos situados en zonas estratégicas como el pecho, las palmas de las manos... Pero nada de eso impresiona al hijo vengador de Atlantis que se lanza contra él con su mítica furia. Lejos de oponerse a la embestida de Namor Cráneo Rojo se deja llevar saliendo los dos de la sala de control.

Fuera de las instalaciones subterráneas de Cráneo Rojo se está produciendo una batalla entre los agentes de SHIELD, el resto de los Defensores y los soldados nazis y las criaturas del Hechicero. Nick Furia se mueve en medio del caos intentando coordinar a los suyos, mientras que Banner golpea a una miríada de criaturas que arremeten en oleadas contra él.

Estela Plateada surfea entre los combatientes lanzando rayos de energía cósmica por doquier derribando enemigos, pero esto le deja desprotegido frente al helitransporte que descarga salvas de mísiles contra él, esquiva las dos primeras pero la tercera hace impacto en su plateada piel arrojándolo contra los restos del Helitransporte de SHIELD. El Hechicero Supremo intenta pensar una estrategia con las Gramandi pero el caos es absoluto, no sabe dónde está el Hechicero y eso le preocupa mucho, en cualquier momento puede aparecer acompañado de cierto demonio y eso, es mejor no pensar que pasaría. Necesitan ayuda. Hay demasiados oponentes y deben encontrar al Hechicero antes de que sea tarde.

Dejemos un instante a Extraño con sus cavilaciones y volvamos a la pelea entre el rey de Atlantis y Cráneo Rojo. Sobrevolando la batalla Namor y Cráneo Rojo luchan sin tregua intercambiando golpes y rayos. La armadura de Cráneo Rojo no sólo le permite volar sino que le protege de la fuerza del hijo vengador. Pero Namor no ceja en su empeño. El combate prosigue sin que se vea su final cerca.

Mientras ocurre esto en el edificio Tempo tiene lugar una agradable fiesta ofrecida por la Corporación X enmarcada dentro de su programa de actividades destinadas a favorecer la integración de los mutantes en la sociedad, dicho en otras palabras, demostrar que no son monstruos como algunos se empeñan en mostrarles, desde organizaciones como la Amigos de la Humanidad o Operación Tolerancia Cero, fuera de circulación afortunadamente las dos, hasta mutantes que se sienten cómodos con esa imagen como Víctor Creed, Dientes de Sable.

En el centro de la fiesta encontramos al anfitrión, Warren Worthington, Arcángel. Mientras controla que todo marcha bien mantiene una agradable charla con Bethany Cabe.

-¿Te gusta la fiesta?

- Te debo una Warren, necesitaba este descanso, no he parado desde que llegué. Espero que no haya más ataques demoníacos en una temporada.

- Yo también, esta es una gran oportunidad tanto para la Corporación X como para los Defensores. No podemos desperdiciarla.

- Hablando de eso, ¿cómo decidisteis asociaros con los Defensores? Su imagen pública está muy deteriorada desde su numerito en plan reyes del mundo.

- Tienes razón, y por eso querían empezar algo nuevo, con este edificio, Extraño me dijo que querían cambiar el mundo sin forzar a la gente, proponiéndoles un nuevo modelo de convivencia, al Profesor Xavier le gustó la idea, además los superhéroes no deberíamos establecer guetos entre nosotros mismo.

Entre la gente famosa que ha venido a la fiesta destaca llamativamente un hombre con aspecto militar y pelo canoso que se dirige hacia Warren con paso decidido, junto a él van dos mujeres, una de ellas una adolescente. El primero en darse cuenta de su llegada es Monet, que hace señales a Warren.

- Hombre Nathan, me alegra verte por aquí.

- Cuando sepas a qué he venido no te va a hacer tanta gracia.

- ¿Nos va a atacar una horda de demonios y mutantes chiflados?

- Casi aciertas, pero no, Extraño nos necesita en la Tierra Salvaje, la situación es grave.

- Es una lástima dejar esta fiesta, con lo que prometía, pero el deber es el deber, Ms. Cabe, te cedo el puesto de anfitrión, mantén un ojo en las cámaras de seguridad, no queremos visitas indeseadas.

- Id tranquilos, saludad de mi parte a los Defensores.


Fracaso, derrota, son unos conceptos a los que se ha acostumbrado con el tiempo. Una vez más ha perdido Atlantis, su conquista fue tan rápida como su pérdida. Humillado (2) se ha retirado a su cuartel con unas tropas desmoralizadas ante la falta de un horizonte claro. Antes el reino de Atlantis era vulnerable cuando Namor se ausentaba pero con el Triunvirato el orden ha cambiado y ya no dependen exclusivamente del hijo vengador para su defensa. Su orgullo militar está gravemente herido, ¿de qué sirve una victoria si es seguida de una aplastante derrota? Ensimismado es sus pensamientos no oye al soldado que entra en su despacho desesperado agitando los brazos frenéticamente.

- Un monstruo ha entrado en la base, Lord Attuma. Está machacándonos y lo destruye todo, dice que quiere verte.

Attuma se levanta y mira con desprecio a su subordinado preguntándose ¿es éste mi poderoso ejército?, le aparta a un lado y sale al pasillo, donde ve más soldados corriendo en todas direcciones aterrorizados.

- ¿Qué ocurre?, ¿Quién osa atacarme en mi centro de poder?

Su piel azul resplandece de ira y aprieta los puños, pronto ve la causa del caos. Es una criatura enorme, verde y con una fuerza descomunal. Y no es Hulk. La criatura reacciona a su llegada parando en su ordalía de destrucción

Y le mira con curiosidad.

- ¿Eres tú Attuma, el poderoso militar atlanteano? Espero que seas mejor que tus soldados.

- ¿Qué pretendes, criatura?

Un detalle llama la atención de Attuma, alrededor de la cabeza del monstruo hay una burbuja de aire, esto activa una cadena de deducciones en su mente que desembocan en la siguiente pregunta.

- ¿Quién te envía?

- Yo.

Un hombre cubierto completamente por un complicado entramado de telas cubiertas por símbolos arcanos sale de las sombras y se sitúa al lado de la Abominación.

- No sé si os conocéis de antes, mi socio verdoso es la Abominación, mi identidad es algo que de momento guardaré para mí, solo necesitas saber que tenemos enemigos comunes. Podéis llamarme Dark Wizard. En tu caso Namor. Te propongo unirte a nosotros para poder lleve a cabo tu venganza con aquellos que te despojaron de tu amada Atlantis, los Defensores.


El Hechicero ve cómo la bola que mantiene prisionero al demonio Sherkelen empieza a ceder a sus artimañas, capa a capa se va deshaciendo como una cebolla, la cercanía del triunfo le emociona. La última capa cae mostrando una pequeña esfera de luz. La esfera asciende treinta centímetros en el aire y se para, un rayo surge de su interior bañando al Hechicero cumpliendo con su parte del trato, entonces prosigue su ascenso y atravesando el techo sale al exterior.

Namor y Cráneo Rojo intercambian golpes y rayos mientras cruzan el valle a velocidad de crucero chocando con soldados, agentes de SHIELD y cualquier cosa que se pone en su camino. Concentrados en su duelo particular no ven la esfera de luz que les sigue en su errático viaje. La furia de los golpes del Hijo Vengador ha reventado partes de la armadura de Cráneo Rojo por donde sale a presión el fluido que la alimenta. La armadura intenta repararse pero los golpes incesantes de Namor mantienen las “heridas” abiertas. Sin embargo todo este esfuerzo junto a los rayos de energía comienza a pesar en Namor. El sudor baña todo su cuerpo y sólo su indómita voluntad lo mantiene en pie.

Los otros tres Defensores apoyan a los agentes de SHIELD, pero sus enemigos los arrinconan, los siervos del Hechicero son más poderosos que los soldados de Cráneo Rojo y destacan con fuerza propia en el combate. Su musculatura está hiperdesarrollada y sus armas son más avanzadas, todo esto plantea dudas sobre su origen, pero eso es una minucia comparada con la hora de demonios que les acompaña. Aves carroñeras, lobos,... arremeten con furia contra el grupo compacto que han formado los muchachos de SHIELD liderados por Nick Furia, que a pesar de la situación mantiene el control, aunque la idea de una inminente derrota empieza a rondar su cabeza.

- Banner, ¿alguna idea para salir de esta?

Banner golpea a dos demonios lupinos y a unos de los súper soldados del Hechicero antes de responder.

- Resistir y rezar para que los refuerzos lleguen pronto.

- ¿Cómo los habéis llamado? Las comunicaciones no funcionan.-Nick Furia dispara varias ráfagas con dos metralletas a la vez que habla con Banner. Delante de ellos se están acumulando cadáveres de los dos bandos formando una especie de barricada humana-demoníaca.

- Las nuestras también están out pero Doc ha contactado con ellos usando magia.

- Dios bendiga a los magos.

Una explosión de luz y color ciega a todos los contendientes parando instantáneamente el combate. Lo que antes era una pequeña esfera de luz ahora es una columna de luz de veinte metros de altura y diez de ancho. El Hechicero acompañado de seis de sus súpersoldados ha salido de las instalaciones subterráneas y observa con satisfacción el fenómeno. En su cara cuarteada se dibuja una sonrisa que parece querer decir: Me encanta que los planes salgan bien.

Sólo dos personas permanecen ajenas a lo que acaba de suceder: Namor y Cráneo Rojo. Su odio mutuo les ha aislado completamente de lo que sucede a su alrededor.

La mole de luz empieza a apagarse mostrando su contenido, una forma humanoide musculosa de piel negra. Su cabeza es dominada por dos ojos rojos enormes que arden como tizones. Su mandíbula cuadrada alberga tres filas de dientes. Capas de escamas a modo de armadura cubren el resto de la cabeza. Como si acabara de despertar de un largo sueño estira los brazos y mira todo lo que le rodea.

Su atención se centra en la pelea a muerte que sostienen Namor y Cráneo Rojo. Su boca susurra con desprecio una palabra, Atlanteano. Estira las manos hacia la pareja, que continúa moviéndose a toda velocidad. Unas llamaradas surgen de la palma de sus manos impactando con decisión en la desprotegida espalda del Rey de Atlantis. Este cae inconsciente al suelo como Ícaro al perder la alas de cera. Cráneo Rojo mira con asombro lo sucedido pero recupera la compostura al instante y sonríe.

- Doc, ¿es lo que creo?

- Me temo que sí Bruce. Nick, esa criatura debe ser detenida a toda costa, siento que no podamos seros de más ayuda, pero es nuestra prioridad.

- Tranquilo, Extraño, con esa bicho no sabríamos ni cómo empezar y nos habéis ayudado mucho, dadle una de mi parte.

Los Defensores salen de entre las filas que forman los agentes de SHIELD y recogen a un herido Namor. Todavía débil se apoya en el hombro de Estela Plateada.

- Parece que la hemos pifiado.

- Aún no.

- ¡Eh, Doc! Mira quién asoma el jeto.- Banner señala al Hechicero.

- Mejor, así no tendremos que buscarlo. Haremos así, vosotros, golpead al Demonio y hacedle todo el daño que podáis, yo me encargo del Hechicero. Namor, tú debes reponerte, así que busca agua marina y vuelve.

- Tienes razón, pero necesitaremos más que eso si queremos derrotar a Sherkelen, sé quién puede ayudarnos.

- Entonces no pierda el tiempo, Namor, la humanidad entera depende de nosotros.

Namor emprende el vuelo, Hulk y Estela se lanzan contra Sherkelen y el Doctor Extraño vuela al encuentro del Hechicero, que lo recibe con el siguiente comentario:

- ¿Preparado para perder tu título, Hechicero Supremo?

- Hablas demasiado rápido.-Las Gramandi, ¿creíais que me había olvidado de ellas?, le susurran a Stephen, Ten cuidado, Sherkelen ha aumentado su poder, ahora es más peligroso pero aún no lo controla.

En otro sitio del valle un triunfante Cráneo Rojo entra en su Helitransporte dispuesto a terminar la batalla cuanto antes.

- Apuntad a los agentes de SHIELD con todo nuestro arsenal, quiero que Furia vea lo que he hecho con su juguete.

- ¿Qué le decimos a nuestras tropas?

- Que se retiren a cubierto, va a llover fuego.

A excepción de los demonios el resto emprende la retirada dando una falsa sensación de tregua. Afortunadamente para Nick Furia llegan los refuerzos. El primero en pisar el suelo es Cable, que llega cargado de armas.

- Hola Nick, ¿aceptáis ayuda?

- Preguntas lo obvio, Cable.


Continuará…

En el próximo número:
La lucha más esperada, el Doctor Extraño contra el Hechicero en Guerra Total, y desvelamos el secreto de Sherkelen.


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Referencias:
1 .- En Capitán América nº15-19 del vol.IV de Planeta
2 .- En Defensores nº 11 de Planeta.


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