Los Vengadores nº04

Título: El fin del comienzo
Autor: Lobo Rojo
Portada: Israel Huertas
Publicado en: Septiembre 2005

¡El Láser Viviente ha regresado... y amenaza con destruir el proyecto Pegaso!! ¿Podrán detenerlo los Vengadores con media alineación atendiendo sus propios problemas? ¡No te lo pierdas!
Y llegó un día en el que los héroes más poderosos de la Tierra se unieron contra el enemigo común...¡Aquél día nacieron los Vengadores!... Para combatir aquellas amenazas que ningún superhéroe podría derrotar en solitario.
Creado por Stan Lee y Jack Kirby


Resumen de lo publicado:Tras rechazar el ataque de la Dínamo Carmesí al Proyecto Pegaso y evitar temporalmente el caos en éste, los Vengadores se disponen a buscar la manera de devolver su cuerpo físico a su viejo enemigo el Láser Viviente, transformado en energía desde hace años. Además la conexión entre el Láser y la dimensión de la luz de la que extrae sus energías ha abierto un portal a nuestro mundo que pone en peligro la seguridad del Proyecto y sus alrededores. De seguir brotando energía por la brecha abierta todo en centenares de kilómetros a la redonda podría ser incinerado. Quasar ha sido capaz de sellar la brecha temporalmente con su bandas quantum del mimo modo que ha almacenado a la forma de energía del Láser (Arthur Parks) en una de ellas. La vengadora Fotón, que es la única que ha entrado en contacto con Parks parece haber apaciguado la ira del Láser con su compasión hacia este. Sin embargo cuando Parks es liberado por Quasar, se encuentra frente a frente con los Vengadores, sus odiados enemigos, y los culpables de su actual estado. Su frágil estado mental desencadena su ira contra ellos iniciándose así...

A lo largo de su historia, la sala de reuniones del Proyecto Pegaso ha albergado a diversos seres sobrehumanos en infinidad de ocasiones, desde la Cosa, Quasar y Bill Foster en su papel de Hombre Gigante, hasta el grupo de super-héroes de otra dimensión conocido como el Escuadrón Supremo. Hoy un pequeño grupo de Vengadores continúa esta tradición... ¡Para su pesar!

Mientras la fulgurante forma de energía del Láser Viviente parecía estar en todas partes, los cinco vengadores presentes, Quasar, el Caballero Negro, Fotón, la Avispa, Iron Man, y su antiguo compañero, el doctor Henry Pym, (vengador una vez, vengador siempre), esquivaban los latigazos de energía al tiempo que cada uno recordaba como habían llegado a esta situación...

QUASAR (Wendell Vaughn)

Esa mañana había acompañado al Caballero Negro al Proyecto Pegaso, donde antaño trabajó como jefe de seguridad. Dane Whitman estaba interesado por razones personales en la seguridad del Proyecto, y le había pedido que le recomendara ante el director del mismo, el doctor Myron Wilburn. Siempre dispuesto a ayudar a un compañero vengador, Wendell le acompañó sin preguntar sus intenciones, y con el propósito de ver a alguno de los viejos amigos que allí dejó. No hubo tiempo para nada, el intento de la Dínamo Carmesí de robar el cañón láser del profesor Vanko desató una explosión de energía y abrió una brecha interdimensional que liberó al Láser Viviente. Aunque en buena medida había logrado sellar la brecha y almacenar la energía viva del Láser en sus bandas quánticas, el esfuerzo mental comenzaba a hacer mella en sus reflejos. Cuando hace escasos minutos los Vengadores se reunieron para deliberar y Iron Man ordenó soltar al aparentemente calmado Parks, ninguno estaba preparado para su reacción.

Ahora...

La velocidad de la luz, a la que el Láser actualmente se movía impedía al cansado Quasar triangular su posición y realojarle en sus bandas quantum. No obstante la seguridad de sus compañeros fue lo primero en lo que pensó por lo que instantáneamente envolvió al Caballero Negro, Pym y la Avispa en sendas esferas de energía quántica. Confiaba en que Fotón y Iron Man podían cuidar de sí mismos. También estaba preocupado por poder mantener la brecha dimensional sellada, sin embargo, como Hank Pym ya había teorizado anteriormente, la intensidad de la energía láser estaba ligada al estado mental del Láser. La furia de éste no ayudaba a mantener la retención. Cuando vio como Iron Man era alcanzado por una descarga láser, su concentración se rompió. Sin pausa para reaccionar, el techo de la habitación cayó sobre él separándole de sus compañeros, la angustia se apoderó de él, y los cierres de la brecha dimensional comenzaron a resquebrajarse. Todo su esfuerzo mental se dirigió a mantenerse consciente e intentar asegurar el tapón de la brecha dimensional. Lamentablemente para ello tuvo que dejar desprotegidos a sus compañeros Vengadores dejándoles a merced del Láser al disolver las esferas protectoras. Las vidas de miles de personas valían más que las de sus tres queridos compañeros.


CABALLERO NEGRO (Dane Whitman)

Sus razones personales cada vez estaban más lejos de permanecer un secreto. Aspiraba a ser líder de los Vengadores, pero antes de serlo quería atar el único cabo suelto que podía perjudicarle en su trabajo. Su visita al Proyecto Pegaso y sus bóvedas de seguridad tenían este propósito. Sin embargo cuando las vidas del Escudo Azul, el jefe de seguridad de Pegaso, y el Dr. Wilburn estuvieron en peligro, se vio forzado a romper su promesa. Todos sus planes de futuro parecían ahora difuminarse. Tras cortar su comunicación con la Visión se dirigió a la sala de reuniones con su enrollada capa bajo el brazo. Allí esperaban sus compañeros vengadores puntuales como era de esperar. Iniciada la reunión, y ante el cansancio mostrado por Quasar, Iron Man le interrumpió. Según el vengador dorado, lo mejor sería intentar dialogar con Arthur Parks. Trabajando unidos sería posible conocer mejor la naturaleza de la energía desatada. Fotón confirmó que Parks parecía dispuesto a colaborar. Un error. Libre, Parks desató toda su furia contra ellos.

Ahora...

No se había enfrentado nunca al Láser Viviente, pero su experiencia junto a Monica Rambeau cuando ella ostentaba el título de Capitana Marvel [1] le permitía aceptar la incredibilidad de la situación al enfrentarse a un ser de energía pura. Sin previo aviso se vio envuelto en un constructo de energía quántica creado sin ninguna duda por Quasar. Casi fue peor, ya que eso le obligaba a ser testigo pasivo de toda la acción. Observó que a escasos metros tanto Pym como la Avispa se hallaban en su misma situación. Vio a Fotón absorber parte de las energías desatadas por Parks. De improviso un fino rayo láser atravesó la armadura de Iron Man, este se retorció de dolor y cayó. El techo se agrietó y parte de él se desplomó sobre Wendell ocultándole de su vista. Instantáneamente las esferas de energía que les protegían se disolvieron. Cayó de cuclillas, adoptó posición de combate y se preparó para intentar esquivar los posibles ataques del Láser. Pero el Láser le ignoró, estaba más interesado en Iron Man, Hank y Jan, a los que acosaba con saña. Viendo el apuro de sus amigos, el Caballero Negro decidió que era el momento de poner las cartas sobre la mesa. Al otro lado de la habitación, oculto cuidadosamente bajo su doblada capa se hallaba el objeto que le había traído hasta aquí. Quizás su única posibilidad de salvación.

FOTÓN (Mónica Rambeau)

Comenzó mal el día. Primero discutió con su madre, luego descubrió que su padre estaba confabulado con ella. La lucha con la Dínamo no había sido problema, sin embargo el encuentro con el Láser Viviente había sembrado dudas y desconfianza en su ser. Imagínate, transformarte en un ser de energía y no poder volver a recuperar tu forma física. La perspectiva era aterradora. Le ocurrió brevemente una vez [2] en la que Spiderman y Starfox se embarcaron en un viaje a otra dimensión para hallar una cura. Sin embargo, cuando regresaron, la situación había revertido por sí sola. La situación del Láser le atemorizaba, pero también había despertado en ella una necesidad, la de rescatar a una persona en semejante situación. Era ante todo una vengadora. Incluso antes de ser vengadora siempre había estado dispuesta a hacer cualquier sacrificio para ayudar a los demás. Los Vengadores podían hallar una sución al estado de Parks. Por eso insistió en ello durante la reunión del grupo que se convocó en el Proyecto Pegaso. No pensó en el odio que el Láser albergaba.

Ahora...

La columna de energía láser en la que Arthur Parks se transformó atravesó la roca sólida y todos los pisos superiores del Proyecto Pegaso hasta subir alto en el cielo para, de improviso, desandar el camino andado y regresar a su lugar de origen donde los Vengadores apenas se habían movido. Suele ocurrir cuando te mueves a la velocidad de la luz. Monica se transformó también en energía láser, permaneciendo a salvo de sus embates al tiempo que hacía todo lo posible por absorber y redireccionar la mayoría de las descargas de Parks hacia donde no pudieran dañar a nadie. Fotón intentó hablar con el Láser, recordarle que los Vengadores estaban ahí para ayudarle, que tenía que dejar de lado cualquier rencor y odio, y colaborar con sus compañeros en la búsqueda de la solución. No tenían que hablar, ambos eran seres de energía emitida en la misma frecuencia, por lo que la comunicación era instantánea. No obstante Parks la reprochó que su anterior conversación solo sirvió para que Quasar le absorbiera dentro de sus brazaletes cósmicos. Primero mataría a los Vengadores, luego hablarían. Monica afirmó su condición de vengadora, el Láser cortó la comunicación y derribó el techo sobre Quasar. La energía láser comenzó a brotar por la brecha dimensional y Foton voló a taponarla.

AVISPA (Janet Van Dyne)

La alerta le pilló en Soluciones Stark trabajando junto a Iron Man. Se sintió ridícula cuando Stark la obligó a alojarse en un diminuto e incómodo compartimiento de una de sus armaduras teledirigidas. Algo que empeoró cuando la armadura fue inmovilizada por la Dínamo y se vio reducida a observar el combate. Ya en Pegaso, encontrarse a Hank vestido con el mono característico de los técnicos del Proyecto fue toda una sorpresa. Le molestó que él no le hubiera confiado sus aspiraciones a trabajar en el complejo. También le chocó la cara de Stark al enterarse de la noticia. La mirada que Hank dirigió a Tony fue muy significativa. Naturalmente, Henry asistió a la reunión de Vengadores. El Láser Viviente era el problema. Un psicópata que se enamoró de ella a primera vista. Un tipo que no intentaba conquistarte con flores, bombones, o una cena romántica, sino humillando a tu novio [3] . Pym, entonces Goliat, le dio su merecido. Sus siguientes derrotas aumentaron su odio por los héroes. ¿Por qué le ayudamos? Porque somos los Vengadores. Nuestro error.

Ahora...

“No estoy a lo que estoy. Llevo días así y me va a costar caro” Dijo para sí. Dos rayos láser rozaron sus diminutas alas. Luego, la energía quantum la rodeó salvándola de otra oleada láser. “Fantás-tico, primero atrapada en una armadura de Iron Man, ahora en esta reluciente carcasa de energía. Ninguno de ellos son los lugares más cómodos para observar un reality show. Un Reality en el que además estoy en calidad de concursante”. Mientras su perspicaz mente, buscaba posibles estrategias, una extraña sensación se apoderó de ella. Le parecía estar con los Vengadores por inercia, como sino tuviera otro propósito en la vida. Sus pensamientos se interrumpieron cuando vio caer a Iron Man, y Quasar desapareció bajo los escombros. Al quedar libre adoptó su tamaño normal y llamó al Láser. “¡Parks! ¡Arthur Parks!” Un holograma de él surgió ante ella. “Querida señora Pym, está más guapa que nunca” “Vuelve a ser Van Dyne” Dijo ella con rotundidad, y prosiguió. “Esto comenzó entre nosotros. ¿Recuerdas? Haz que termine ahora”. Se oyó gritar a Pym. La mano de Hank tocó el hombro de Jane y por contacto la redujo de tamaño. Sin aviso, Jane estaba atrapada en el gigantesco puño de su exmarido. “Genial, la armadura de Iron Man, la esfera de Quasar, y ahora protegida por la manaza de mi ex. Comienzo a hartarme”.

IRON MAN (Anthonny Stark)

Apenas hace unos días había influido en la directiva del Proyecto Pegaso para que eligieran como nuevo director de la unidad de Investigación y Desarrollo Tecnológico, al doctor William “Bill” Foster. Hoy, una alarma de los Vengadores procedente de ese mismo lugar hizo que junto a la Avispa abandonase el caso que investigaban [4] y volasen hasta allí, junto a una de sus armaduras teledirigidas. Tras un breve enfrentamiento con un nuevo Dínamo Carmesí en el que éste logró de alguna manera bloquear la señal que le permitía dirigir la otra armadura, el vengador derrotó al ruso pero por desgracia el soviet tenía aliados que lograron rescatarle. Con la segunda armadura reactivada, se dirigieron al interior del Proyecto donde se encontraron de cara con Hank Pym. La mirada de Pym hacia él, no presagiaba nada bueno. Reunidos los Vengadores y Pym, optaron por intentar ayudar al Láser Viviente a recuperar su cuerpo físico pensando que este colaboraría. No pensaron que su grado de locura le haría volverse contra ellos poniendo a todos en peligro.

Ahora...

“Debimos suponer que Parks reaccionaria así.” En la enfermería del Proyecto, su armadura teledirigida realizaba una visita de cortesía al doctor Myron Wilburn. Allí se encontraba Bill Foster, al que felicitó por su nuevo cargo. El rostro sombrío de Bill le impulsó a preguntar si algo marchaba mal. Al mismo tiempo, en la sala de reuniones donde el Láser Viviente se había desatado, Stark pilotaba su armadura principal esquivando mediante sus computadoras de navegación todas las descargas de energía lanzadas contra él. Iron Man buscaba la manera de retener la energía viviente del Láser. “Siempre hay un modo” se decía asimismo. En la sección médica Bill Foster le comentaba “¿No lo sabes?”. “¿El qué?” preguntó en la enfermería mientras sus campos magnéticos rechazaban una oleada de luz en la sala de reuniones. “El puesto que acabo de conseguir gracias a tu recomendación se lo hemos quitado a Hank Pym.” “¿QUÉ?” Un instante de duda, un momento de vacilación, son más que suficientes para cometer un error, sobre todo cuando te enfrentas a un ser de energía capaz de moverse a la velocidad de la luz. Un fino rayo de luz alcanzó la armadura principal de Stark y atravesó su hombro, cauterizando la herida al instante. “¿Por qué nadie me dijo que Hank Pym quería trabajar en Pegaso?” dijo mientras caía contra el suelo.

HENRY PYM (Chaqueta Amarilla)

Como se suele decir, Iba a ser el primer día del resto de su vida. Había dejado atrás su vida aventurera, sus disfraces y sus múltiples identidades. Se dirigió al Proyecto Pegaso donde pensaba que tenía asegurada la plaza de director de la sección de Investigación y Desarrollo Científico. ¿Y que encontró? No solo se vio envuelto en una crisis junto a sus compañeros Vengadores, sino que además descubrió que el puesto al que optaba se lo habían dado a otro, a su amigo Bill Foster. Y para colmo, por recomendación forzada de otro de sus íntimos amigos, Tony Stark. Ahora, sin trajes de moléculas inestables, sin cascos cibernéticos, ni nada de su clásico arsenal, tan solo con sus poderes de crecimiento y disminución de tamaño y enfundado en el mono de trabajo de los técnicos del Proyecto, asistía a una reunión de los Poderosos Vengadores. Quizás era una señal del camino que debía seguir. Regresar con los Vengadores a pleno rendimiento durante la próxima temporada. Con Jan... y con Stark... Esto es, si el furibundo Láser les permite seguir vivos.

Ahora...

“No tenía que haberse callado. Después de todo, él fue el primero en combatir al prepotente e inseguro Parks. Había muchas posibilidades de que tuviese una reacción violenta al aparecer ante sus más odiados enemigos. ¿Nadie lo vio venir?” Pensaba Pym mientras buscaba la manera de salir del constructo protector que Quasar había creado en torno a él. Ahí estaba, en medio de una tormenta de luz letal con el único poder de aumentar o disminuir su tamaño y el de los objetos a su alcance. Rebuscó en los bolsillos del mono de trabajo del Proyecto Pegaso que le habían prestado. Tan solo halló unas gafas de sol de cristal de espejo. “Interesante”. Sin previo aviso su protección desapareció. Usando su control sobre las Partículas Pym aumentó el tamaño de las lentes de las gafas, transformándolas en sendos espejos capaces de reflejar los ataques láser de su enemigo. Fue entonces cuando vio a Jan desafiante y hermosa adquirir su tamaño normal y retar al Láser. Este parecía dispuesto a eliminarla. Con un grito de desesperación Hank corrió hacia ella y al tocarla activó las partículas Pym para reducirla de tamaño, protegiéndola cuidadosamente en la palma de su mano. Adquiriendo su máximo tamaño reduciendo a jirones del mono que vestía, se dispuso a proteger con su cuerpo el de la mujer que amaba.


En la sala de guerra de la gigantesca aeronave Potemkim V, los altos mandos de la nave observaban la evolución de las energías luminosas que se habían desatado sobre el Proyecto Pegaso.

- Agente Dínamo. ¿Se puede saber que has hecho? – Interrogó el general Brevlov.

- Me he limitado a cumplir con mi misión, mi general. Mis órdenes...

- Sus órdenes eran introducirse en el Proyecto Pegaso y recuperar el aparato láser creado por nuestro difunto compatriota el honorable profesor Antón Vanko, y ante la imposibilidad de ello destruirlo sin posibilidad de reconstrucción. ¿se puede saber que ha desatado? – inquirió Gregory Azknar, ayudante del general.

- Coronel Azknar, mis estudios sobre la tecnología de Vanko indican que es imposible que su proyector láser pudiera desatar semejante fuerza destructora.- Intervino el doctor Karl Kort.- El agente desencadenante debe ser un elemento que ellos ya tenían allí.

- Así pues, lo que les ocurra ahora a los americanos será probablemente culpa de ellos ¿no? – Dijo una cuarta persona en la mesa. Una persona confinada en una silla de ruedas.

Todos miraron el iluminado horizonte. Si alguno hubiera creído en dios se hubiera santiguado y habría elevado oraciones por las vidas que allí corrían peligro. La cuarta voz, giró la silla de ruedas sobre sus ejes y se dirigió hacia la Dínamo Carmesí para preguntarle en privado.

- Dime. ¿Te enfrentaste a él? ¿Cómo fue? Apasionante ¿verdad?


La locura del Láser Viviente no le permitía darse cuenta de lo humorístico de la situación. Ante él se hallaba un gigantesco Hank Pym desnudo, armado con dos espejos gigantescos, que tan solo eran las lentes de unas gafas agrandadas por las partículas Pym y que rechazaban sus ataques a medida que se iban fundiendo cada vez más y más deprisa. En el puño izquierdo de Pym, este pretendía mantener a la Avispa a salvo, a la espera de ganar tiempo para sacarla de esa situación. Janet se enfadó y no aguantó más. Como si de una verdadera Avispa atrapada por un mano humana se tratase, descargó sus aguijones sobre el puño que la atrapaba y obligó a su exmarido a soltarla dolorosamente.

- Perdona cariño – Dijo mientras volaba fuera de la mano – Pero me has obligado.

- Solo quería protegerte.- Dijo él.

- Lo se, y lo agradezco, pero somos Vengadores y corremos los riesgos a partes iguales. – Contestó ella.

- Parks, ¿quieres matarnos de verdad? ¿Quieres seguir siendo un ser de energía? - Chilló la Avispa al villano. Y de nuevo recuperó su tamaño normal. – Escúchame Parks...- y Henry Pym disminuyó su tamaño para respaldar a su mujer. Lentamente, el magullado Iron Man se arrastró hacia ellos.

El Láser Viviente vio como la Avispa, Pym y Iron Man permanecían erguidos ante él. No le importaban sus ofertas. Eran culpables de su sufrimiento. Había soñado durante años con poder incinerarles y ahora por fin el sueño se hacía realidad.

- Arded y morid. – Dijo con una sonrisa.


Dane Whitman observó toda la escena horrorizado y finalmente tomó una decisión. Con paso firme y decidido se unió al trío de Vengadores acosados por el Láser y se puso al frente.

- Otro que quiere morir.- dijo el ser de energía.

- Ríndete Parks. O te dolerá – Advirtió el Caballero Negro. Whitman miró al otro lado de la habitación donde yacía su capa doblada. Se concentró y el objeto que había bajo esta desapareció.

- ¡Morid ya! ¡Ja,ja,ja,ja,ja! – Chilló el Láser triunfante mientras lanzaba una oleada de luz sólida contra sus enemigos.

La energía pareció alcanzar al cuarteto en una milésima de segundo. Sin embargo nada ocurrió. Cuando el resplandor cesó, ante el Láser se hallaban los mismos cuatro héroes completamente indemnes. Tan solo algo había variado. En las manos del Caballero Negro una espada de acero negro se había materializado. Los otros tres vengadores estaban tan asombrados como Arthur Parks.

- ¿Qué demonios? – Exclamó el Láser.

- Es la Espada de Ébano. – contestó Whitman - Forjada del metal de un meteorito por Merlín en los tiempos del legendario Camelot, y reforzada por hechizos que le permiten absorber cualquier tipo de energía y devolverla, así como cortar cualquier sustancia. Una hoja maldita si prueba la sangre y que traje a este complejo con la intención de encerrarla en un lugar seguro. Ahora, por tu culpa, vuelvo a estar ligado a ella. – Continuó el Caballero mientras avanzaba hacia el Láser.- Y sabes qué, me alegro, como te he dicho es capaz de cortar cualquier sustancia...

El Láser vaciló ante la furia que destilaban los ojos de Whitman.

-...cualquier sustancia, ¡¡¡INCLUIDOS SERES DE ENERGÍA!!!- Terminó de decir Whitman mientras su hoja partía en dos la forma energética del Láser Viviente.

El Láser chilló como si le hubieran amputado un brazo, y se replegó sobre sí mismo, desapareciendo. En la brecha dimensional Fotón y Quasar notaron como la furia de ésta disminuía. La violencia de sus energías se calmaba, y el portal volvía a quedar sellado.

Iron Man, Pym y la Avispa miraron a la solitaria figura del Caballero Negro ante ellos. Ninguno se atrevía a hablar. Finalmente Janet lo hizo...

- ¿Dane, la maldición...?

- No os preocupéis – Contestó Whitman sonriente – La maldición de la espada se activa solo si prueba sangre humana. El Láser como ser de energía no representaba problema. De hecho, solo hemos ganado algo de tiempo. Como ya sabéis, la energía ni se crea ni se destruye, únicamente se transforma. Una vez supere el dolor, el Láser se reenergizará. ¡Debemos prepararnos!


Amanece en el Local de Carlton. La policía termina de llevarse detenidos a los Forzadores y al Hombre Montaña, entre otros de los facinerosos clientes del bar, seguros de que se les busca por algo. En la barra, y tras haber acordado redactar sus informes para la policía esa misma semana, Ojo de Halcón y Hércules apuran su siguiente cerveza. El arquero espera con paciencia que el semidios le permita abordar el tema que le interesa.

-... y allí estaba Desak, inconmensurable en su poder, armado con la afilada hacha con la que había decapitado a decenas de panteones a lo largo de las eras. No se qué hubiera sido del noble Thor y el valeroso Leir de no contar con la ayuda del todopoderoso Hijo de Zeus a su lado... [5]

- Hércules...

- ¿Me interrumpes? ¿Acaso te aburro?

- Me se el final. Leí el informe antes de ayer. Aunque he de decir que la versión que le pediste a Jarvis que redactara era más concisa y directa.

- Ah, el siempre leal y eficaz mayordomo... ¿Pero dime, querías algo? ¿Qué se te ofrece? Volvemos a ser amigos y camaradas.

- Estaba preguntándome... ¿apoyarías mi candidatura a líder de los Vengadores?

El rostro de Hércules cambió de talante. Adoptando un aspecto formal más serio contestó.- No, mucho me temo que mi palabra ya está comprometida con el valiente Dane Witman.

Ojo de Halcón supo disimular su desencanto, no obstante el Príncipe del Poder quiso aliviar la situación y se ofreció a rellenar las jarras. Un agente les interrumpió.

- Perdonen pero hemos de precintar el local.

- Está bien - contestó el arquero – de todas maneras ya nos íbamos. Tenemos que informar a nuestros compañeros.

Al salir del local, y mirar al cielo de Manhattan, el vengador observó dos columnas de humo negro. - ¿Qué diablos? – preguntó a los policías presentes.

- Son los edificios del Excelsior y el Palatino. Llevan ardiendo toda la noche, al parecer vuestro compañero Visión ha estado implicado. – le contestó el sargento Keegan.

- Acabamos de recibir un comunicado del teniente Stern de que la Visión acaba de frustrar un asesinato en el Hospital Memorial [6] . – Se apresuró a decir otro agente desde el interior de su vehículo.

- La Visión..., el Memorial... Hummm... ¿Alguno de vosotros sería tan amable de acercarnos a mi compañero olímpico y a mí hasta allí? – Pidió el arquero con su tono más servicial, educado y embaucador.


- ¡El Láser no tardará en reformarse!. Hemos de actuar rápido – Dijo el Caballero negro - ¡Quasar! ¡Fotón! ¿Cómo va la brecha?

- Sellada y contenida, valeroso y futuro líder – contestó Quasar.

- Localizad a Parks e intentad contenerlo. Traedlo de regreso aquí. ¡Lo vamos a curar quiera o no! – Ordenó Whitman.

- ¿Ah, sí? ¿Cómo lo haremos señor Caballero? – preguntó inquisitiva la Avispa.

- Todavía no lo sé. – Y miró a su alrededor – Pero te diré una cosa, Jan. Estamos en el Proyecto Pegaso una de las instalaciones de energía más sofisticadas del planeta. Contamos con los intelectos de Henry Pym y Tony Stark, además de los poderes de manipulación de energía de Wendell y Monica. Si nosotros no podemos, nadie puede.

Las miradas incómodas de Pym y Stark se cruzaron por un momento. El Caballero prosiguió.

- ¡Hank, Iron Man, acompañadme al laboratorio! ¡Avispa, necesito que controles los progresos de Quasar y Fotón y nos tengas informados abajo! ¿Todos de acuerdo?- Todos asintieron como un solo hombre.


- Pues...¡VENGADORES REUNÍOS!


- Me llamo Arthur Parks y mi pasión es la ciencia. – se repetía este pensamiento así mismo como un mantra, un mantra que le servía para reformar las partículas de luz que formaban parte de su ser y con las que conformaba una imagen holográfica que emulaba su antigua apariencia. En los años transcurridos desde que perdió su cuerpo físico jamás le habían hecho tanto daño como con esa condenada espada encantada. Había olvidado lo que era el dolor. Fue mientras se reconstituía y consideraba lo que había pasado cuando Fotón y Quasar se materializaron ante él.

- ¡Dejadme en paz! – chilló.

- Escúchanos, Arthur, - dijo suavemente Fotón – solo queremos ayudarte.

- ¿Ayudarme? ¿Cómo puede alguien ayudarme?

Quasar observaba expectante la escena. Habían acordado que Mónica llevaría la voz cantante e intentaría apaciguar el carácter del Láser, convenciéndole de que con la ayuda de los Vengadores podría salir adelante. Le hubiera gustado descansar un poco, no obstante esta vez estaba preparado para volver a absorber a Parks en su bandas quánticas. Las lecturas de sus pulseras alienígenas le confirmaban que de alguna manera la Espada de Ébano había cortado la conexión del Láser con la dimensión de la que extraía sus energías. Pero eso solo era momentáneamente, a medida que transcurrían los segundos, los niveles comenzaban a crecer. Desde su puesto de observación se fijó en su compañera. Siempre había oído hablar muy bien sobre la antigua Capitana Marvel, valiente y poderosa, pero también cauta y compasiva... Al escuchar el tono de voz y los argumentos que empleaba para persuadir a Parks, se dio cuenta de que todos los elogios no le hacían justicia. El mismo Láser Viviente parecía estar entrando en razón gracias a su calmada y agradable charla.

- ¿Dejar de ser parte del problema y formar parte de la solución? – dijo Parks.

- Exactamente.

- Sí, pero... ¿Cómo?

- Láser...Arthur, probablemente fuiste y seas la mayor autoridad mundial en energía láser. Si unes tus conocimientos a los de Henry Pym y Tony Stark. ¿No crees que tienes más posibilidades de recuperar tu añorada forma humana?

Arthur Parks se quedó pensativo y en silencio.


El vestíbulo del Hospital Memorial era un hervidero de actividad. En medio de ella la doctora Jane Foster despedía a la Visión

- Dra. Foster muchas gracias por la ayuda. Estaremos en contacto.

- Soy yo quien debe de darte las gracias a ti vengador, sin tu intervención muchos de los pacientes que hoy tenemos no hubieran llegado con vida ni siquiera a las ambulancias [7] . – y bajando la voz – y descuida, me ocuparé personalmente de supervisar a tus amigos...


- ¡Hey Visi! Parece que has tenido una fiesta privada. - Ojo de Halcón y Hércules entraron por la puerta principal. – y no nos has invitado. Acabamos de ver un transporte de SHIELD abandonar el lugar ¿qué ha pasado?. Da igual, nosotros también organizamos nuestro propio guateque. Verás encontramos a los Forzadores y a Marko, el Hombre Montaña...

- ¡Milady Jane!- Interrumpió Hércules con bullicio.

- ¿Hércules? ¡Cuánto tiempo! - Exclamó la doctora Foster con alegría mientras los poderosos brazos del Hijo de Zeus la levantaban como si fuera una pluma. Ella reaccionó enseguida - Hércules, gran oso, bájame enseguida, este es mi lugar de trabajo, y soy una mujer casada...

- Casada, es cierto. Thor me lo contó hace ya tiempo. Parece mentira, como cambian las cosas con el paso del tiempo. Cuando te conocí, Thor y tú erais una pareja cuyo amor parecía que iba a desafiar a los mismos dioses, y en verdad lo hacía. Ahora, pasados los años, ambos habéis contraído matrimonio con otras personas.

- ¿Thor? ¿Thor se ha casado? – preguntó la sorprendida Jane - ¿con quién? ¿Sif?

- ¡Ay no! Me temo que su romance con la bella y valiente Dama Sif terminó hace ya tiempo. La dama que ahora ocupa el corazón del Dios del Trueno y se sienta a su lado en el trono de Asgard es Brighit, una diosa perteneciente al panteón celta.

- Ya... Después de todo una diosa tenía que ser. Parece que los romances entre mortales e inmortales no están destinados a llegar a buen puerto. – comentó la doctora.

- En verdad es así... – Asintió Hércules. Y su rostro abandonó su jocosa sonrisa para adoptar un gesto más melancólico. Durante unos instantes el brillo de sus ojos desapareció y su mirada se perdió mirando más allá de Jane y sus compañeros presentes. – Ahora, si me perdonáis, tengo que rellenar unos informes. Me alegro de haberte visto, doctora Jane.

- ¡Hércules, espera! – Le dijo Ojo de Halcón mientras iba tras él.- Visión, luego quiero hablar contigo.

– Dijo al llegar a la puerta.

- ¿Qué...qué he dicho? ¿Le he molestado? – Preguntó la doctora a la Visión.

- No hace mucho, el Hijo de Zeus se enamoró de una mortal llamada Taylor Madison y al parecer ella le correspondía. Su relación terminó cuando Zeus reveló que Taylor no existía, que era una creación suya con las características de la dama ideal para Hércules, usada como cebo para descubrir las maquinaciones de Hera contra el Príncipe del Poder. Cuando Zeus desbarató el complot de Hera, Taylor dejó de existir. Al parecer Hércules, pese a la actitud despreocupada que a menudo aparenta todavía no ha superado la pérdida.

- Pobre Hércules. Parece mentira que querer a algo que no existe te pueda doler tanto.

- En verdad lo es, doctora Foster. Y ahora si me disculpa... Estaremos en contacto. Y tras despedirse, la forma intangible de la Visión se elevó hacia el cielo sin poder evitar pensar en sus hijos perdidos. Unos niños que tampoco existieron.


Mientras el Caballero Negro, Iron Man y Henry Pym, trabajaban en uno de los reacondicionado laboratorios del Proyecto Pegaso, el ambiente era tenso entre ellos. Por una parte, Pym y Stark no estaban en los mejores términos, por otra Dane Whitman había pospuesto sus explicaciones respecto a la Espada de Ébano para después de conjurada la amenaza del Láser. La voz de Janet Van Dyne les aleccionaba por los altavoces.

- En un principio, el Láser era un hombre normal armado con los más sofisticados proyectores de energía láser del planeta, pero sus constantes derrotas le llevaron a someterse a un proceso que le permitiera crear energía láser desde su propio cuerpo. Para ello contactó con un científico llamado Jonas Harrow. Harrow implantó en el cuerpo de Arthur una serie de diodos capaces de absorber la luz de su alrededor y transformarla en energía láser [8] . Ahora Parks no solo podía emitir sus letales ráfagas, también podía crear hologramas, o manipular la luz alrededor suyo hasta ser invisible, entre otros trucos. Pero el ansia de poder y de venganza de Parks le llevaron a aceptar una oferta del Conde Nefaria por la cual este se comprometía a aumentar sus energías láser si Parks trabajaba para él. En realidad los científicos de Nefaria aumentaron sus poderes sólo momentáneamente, ya que su verdadero objetivo era centuplicar su poder en el propio Conde [9] . Parks fue a la cárcel donde descubrió que las manipulaciones del Conde le habían causado mella y estaba perdiendo el control de sus poderes. Los diodos implantados por Harrow absorbían cada vez más luz y se veía obligado a desatar sus energías cada vez más precipitadamente, a riesgo de perder su cohesión corporal, lo que finalmente ocurrió en combate con Iron Man [10] . Desde entonces su forma de energía, unas veces más cuerda que otras, ha aparecido aquí y allá. Ahora si que era un verdadero Láser Viviente.

- Bien caballeros, ¿teorías? – dijo Whitman.

- Bueno, yo diría que tendríamos que buscar los múltiples diodos implantados en Parks y anular su efecto. Solo entonces su energía se agotaría. Pero... – Stark miró a sus socios – pero no sabemos a ciencia cierta si eso nos devolvería el cuerpo físico de Parks o simplemente le apagaría como una bombilla. Es un riesgo...

- Es un riesgo que entraña la posibilidad de perder una vida humana, por tanto inadmisible para los Vengadores. – replicó Pym - Dane, ¿recuerdas los estudios que realizaste sobre la raíz de los poderes de Fotón?

- Por supuesto. – Contestó sorprendido Whitman – ¿los leíste? – Dijo halagado, no esperaba que nadie en los Vengadores hubiera leído sus trabajos científicos. Pensaba que estaban archivados para cuando alguien necesitase echar mano de ellos. Pym siguió hablando.

- Monica por puro esfuerzo mental es capaz de abrir una brecha a otra dimensión de la que extrae el tipo de energía que necesita, sustituyendo su cuerpo físico por la energía elegida. Cuando termina de usarla convoca a su cuerpo físico de aquella dimensión y devuelve la energía a su lugar de origen. Siempre supusimos que el cuerpo del Láser se desintegró debido a la falta de control de sus poderes, pero, ¿Y si los diodos implantados, operando descontroladamente hubieran abierto la brecha a la dimensión de la que proceden sus energías, y hubieran lanzado hacia allá su cuerpo, sustituyéndolo por la cantidad de energía láser que vemos? Su mente está aquí, pero su cuerpo allí...

- Eso explicaría por qué la brecha dimensional creada por la máquina láser del profesor Vanko no se cerró cuando esta fue destruida. Parks la mantiene abierta instintivamente, buscando una manera de recuperar su vida. – Añadió Whitman.

- Quasar comentó que en los momentos de furia del Láser, las energías del otro lado de la brecha, golpeaban con furia intentando salir.- intervino la Avispa.

- Lo que estáis diciendo, es solo una teoría - apostilló Stark – Necesitaríamos realizar una serie de estudios comparativos entre Fotón y el Láser para corroborarla, y no creo que Parks ...

- ¡Hacedlo, por favor!- se oyó una voz suplicante

Fotón, Quasar y la forma de energía del Láser entraron en el laboratorio. Arthur Parks miró a sus viejos enemigos. Después se miró así mismo y tras recordar en lo que se había convertido, volvió a decir.

- Por favor, ayudadme. ¡Os lo suplico! Devolvedme mi vida.


Epílogo 1:

Han pasado las horas en el Proyecto Pegaso. La brecha dimensional ha ido desapareciendo a medida que Arthur Parks se relajaba. La forma del Láser Viviente ha consentido ser almacenada en las bandas quantum de Quasar con quien viajará a un lugar habilitado y financiado por Soluciones Stark donde las mentes más brillantes de los Vengadores podrán buscar una cura sin poner a nadie en peligro.

En el aparcamiento del Proyecto, la doctora Mayfair, el doctor Foster y el Escudo Azul despiden a los Vengadores en nombre del doctor Wilburn que todavía permanece ingresado en la enfermería. Bill Foster y Hank Pym charlan cara a cara.

- Entonces no aceptas la oferta de trabajar con nosotros. – Preguntó Foster.

- No. Gracias Bill. – Contestó Pym – Era una oferta muy buena, pero actuar con los Vengadores en esta ocasión me ha parecido muy significativo. El tipo de señal del destino que no hay que ignorar.

- Hank, sino te conociera bien diría que has dejado de ser agnóstico. ¿Sin rencores?

- ¿Lo dices porque me has quitado el trabajo de mi vida? – Dijo esbozando una sonrisa.

- No, porque no te he dejado ninguno de los trajes de moléculas inestables que acostumbro a llevar conmigo. Ya sabes, por si tengo que cambiar de tamaño. [11] – contestó Foster.

- Serás...- y los dos viejos amigos comenzaron a reír fundiéndose en un abrazo de despedida.


Epílogo 2:

El día ha sido largo y duro, en la intimidad de su despacho en el Hospital Memorial, la doctora Jane Foster termina de rellenar las circulares y los informes de las tareas cotidianas del centro. Un nombre resuena una y otra vez en su mente. – Taylor Madison - ¿Dónde ha oído-leído ese nombre hace poco? Llevada por un presentimiento, mueve el ratón, abre una carpeta y pulsa intro en un archivo. Teclea un nombre, Madison, Taylor. Pasan dos segundos. Sus ojos se abren ante la información que aparece en la pantalla y exclama. – ¡Dios mío, Hércules no se lo va a creer...!

Continuará...


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Referencias:
1 .- Serie original USA, Avengers (V.1) 259-294.
2 .- Serie original USA, Marvel Team Up (V.1) 143-144.<
3 .- Serie original USA, Avengers (V.1) 34,35
4 .- Referente a los ataques sufridos por diferentes jefes de Maggia. Ver La Visión #02, y siguientes
5 .- Hércules hace referencia a la batalla que podéis leer en Action Tales, Thor 4 y 5
6 .- No me canso de recomendaros que leáis La Visión en Action Tales. En este caso el número 3
7 .- Lo vuelvo a repetir Ver La Visión 3 en Action Tales.<
8 .- Información extraída del Official Handbook of the Marvel Universe.<
9 .- Avengers (V.1) 164,165
10 .- Iron Man (V.1) 152,153
11 .- Bill Foster en ocasiones ha usado las Partículas Pym para cambiar de tamaño usando las identidades de Goliath Nego o el segundo Hombre Gigante.

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